Eficacia de la modulación dietética con alto contenido rebiótico y probiótico sobre el estado nutricional y metabólico en trastornos del espectro esquizofrénico

Abstract

Introducción: El enfoque terapéutico tradicional ha percibido el papel de la nutrición y modificación de estilos de vida como una intervención menor en salud mental. El avance en términos de psiquiatría nutricional y desarrollo de nuevas premisas etiológicas respecto a los trastornos mentales, destacando la teoría del eje microbiota-intestino-cerebro, evidencia la influencia de los psicobióticos (prebióticos y probióticos de acción nutracéutica) en la mejora de variables clínicas alteradas de trastornos neuropsiquiátricos, en términos de salud física y disfunción psicopatológica. Objetivos: Determinar la eficacia de la modulación dietética de alto contenido prebiótico y probiótico en pacientes diagnosticados del espectro esquizofrénico, atendiendo al impacto nutricional, cardio-metabólico y psicopatológico. Material y Métodos: Se desarrolló un ensayo clínico de dos brazos, aleatorizado mediante bloques balanceados, doble ciego, de seis meses de intervención, en un grupo de 50 individuos diagnosticados de trastornos del espectro esquizofrénico (sin distinción por tipo). El grupo control (n=25) estuvo constituido por aquellos participantes que recibieron consejo dietético estandarizado de forma individual. En el grupo de intervención (n=25), ésta se estableció individualmente mediante consejo nutricional intensivo para el incremento del consumo de alimentos con alto contenido prebiótico y probiótico (lácteos y alimentos fermentados, verduras de hoja verde, fruta rica en fibra, cereales integrales, etc.). En ambos grupos, se empleó material educativo de apoyo visual durante las sesiones impartidas La intervención dietética fue diseñada y supervisada por personal titulado y con competencias reconocidas (enfermeras y dietistasnutricionistas). Del mismo modo, se establecieron grupos focales previos que permitieron redifinir y orientar la adecuación del estudio. Durante el desarrollo del ensayo clínico, se obtuvieron datos sobre el estado psicopatológico (escalas PANSS y PSP) y del perfil analítico (hemograma y bioquímica), de forma basal, a los tres y seis meses de intervención, respectivamente. Del mismo modo, se determinó la estimación de la microbiota intestinal mediante coprocultivo, así como evaluación del patrón dietético y nutricional (Cuestionario de Frecuencia de Consumo de Alimentos) al inicio y a los seis meses de intervención. Para la valoración del grado de adherencia entre grupos de asignación, se cumplimentó un registro semanal de los principales platos y alimentos simbióticos consumidos. Finalmente, se analizaron parámetros antropométricos de forma mensual.I Resultados: 44 participantes completaron el seguimiento y fueron analizados. El análisis nutricional mostró una reducción estadísticamente significativa de las ingestas de macro y micronutrientes con una mayor aproximación a las ingestas dietéticas recomendadas. Así mismo, se evidenció una reducción intragrupo (p < 0,05) del perfil proteico, azúcares y alimentos ultraprocesados. Respecto al grado de adherencia entre grupos de asignación, se evidenció un aumento en el consumo de alimentos con alto contenido simbiótico en el grupo de intervención. Por otro lado, con relación al impacto cardio-metabólico, se obtuvieron diferencias estadísticas (p < 0,001) en todas las variables del perfil antropométrico en el grupo experimental. Tras 6 meses de estudio, se observó una reducción del 27,4% en la prevalencia de factores de riesgo del síndrome metabólico en todos sus componentes, lo que condujo a una mejora clínicamente significativa del riesgo cardiovascular en el grupo de intervención. Por último, distante del impacto psicopatológico observado en el grupo control, los resultados mostraron una mejora estadísticamente significativa (p < 0,05) en las puntuaciones de la subescala PANSS-PG y de la escala PSP, a lo largo de 3-6 meses de intervención. Conclusiones: El grado de evidencia alcanzado permite establecer el consejo nutricional centrado en el incremento de la ingesta de alimentos con alto contenido simbiótico como una terapia coadyuvante eficaz en el abordaje de trastornos esquizofrénicos en términos dietético-nutricionales, cardio-metabólicos y psicopatológicos. Así mismo, el uso de prebióticos y probióticos ha demostrado ofrecer una solución relevante y prometedora en diferentes contextos de aplicación. Enfermería de práctica avanzada adquiere un papel destacado en la coordinación multidisciplinar y en la consecución de óptimos resultados en salud, mediante la prevención y promoción de estilos de vida saludables en salud mental, a través de la educación nutricional.

Introduction: The traditional therapeutic approach has perceived the role of nutrition and lifestyle modification as a minor intervention in mental health. Progress in terms of nutritional psychiatry and the development of new aetiological premises regarding mental disorders, highlighting the theory of the microbiota-gut-brain axis, shows the influence of psychobiotics (prebiotics and probiotics with nutraceutical action) in the improvement of altered clinical variables of neuropsychiatric disorders, in terms of physical health and psychopathological dysfunction. Objectives: To determine the efficacy of dietary modulation of high prebiotic and probiotic content in patients diagnosed with schizophrenia spectrum disorder, taking into account the nutritional, cardio-metabolic and psychopathological impact Material and Methods: A two-arm, randomised, balanced-block, double-blind, sixmonth intervention trial was conducted in a group of 50 individuals diagnosed with schizophrenia spectrum disorders (without distinction by type). The control group (n=25) consisted of those participants who received individual standardised dietary advice. In the intervention group (n=25), the intervention was established individually by intensive nutritional advice with high prebiotic and probiotic content (dairy and fermented foods, green leafy vegetables, fibre-rich fruit, whole grains, etc.). The dietary intervention was designed and supervised by qualified staff with recognised competencies (nurses and dietician-nutritionists). From the same, serial focus groups were established to redefine and guide the appropriateness of the study. During the clinical trial, data were obtained on the psychopathological state (PANSS and PSP scales) and analytical profile (haemogram and biochemistry), at baseline, three and six months after the intervention, respectively. Similarly, the estimation of the intestinal microbiota was determined by stool culture, as well as assessment of the dietary and nutritional pattern (Food Consumption Frequency Questionnaire) at baseline and at six months of intervention. In order to assess the degree of adherence between allocation groups, a weekly record of the main dishes and symbiotic foods consumed was completed. Finally, anthropometric parameters were analysed on a monthly basis. Results: 44 participants completed follow-up and were analysed. Nutritional análisis showed a statistically significant reduction in macro- and micronutrient intakes with a closer approximation to recommended dietary intakes. There was also an intra-group reduction (p < 0.05) in protein profile, sugars and ultra-processed foods. Regarding the degree of adherence between allocation groups, there was an increase in the consumption of foods with a high Isymbiotic content in the intervention group. On the other hand, in relation to the cardio-metabolic impact, statistical differences were obtained (p < 0.001) in all variables of the anthropometric profile in the experimental group. After 6 months of study, a 27.4% reduction in the prevalence of metabolic syndrome risk factors in all its components was observed, leading to a clinically significant improvement in cardiovascular risk in the intervention group. Finally, distant from the psychopathological impact observed in the control group, the results showed a statistically significant (p < 0.05) improvement in PANSS-PG subscale and PSP scale scores over 3-6 months of intervention. Conclusions: The degree of evidence achieved allows establishing nutritional management with high symbiotic content as an effective adjuvant therapy in the management of schizophrenic disorders in terms of dietary-nutritional, cardio-metabolic and psychopathological disorders. Likewise, the use of prebiotics and probiotics has been shown to offer a relevant and promising solution in different application contexts. Advanced practice nursing takes a leading role in multidisciplinary coordination and achievement of optimal health outcomes, through prevention and promotion of healthy lifestyles in mental health, through nutritional education.