Predicción de la enfermedad cardiovascular en pacientes coronarios a través de una escala de recurrencia de eventos clínicos e influencia de la dieta. Estudio Cordioprev

Abstract

ANTECEDENTES: Los individuos que han sufrido un evento cardiovascular tienen un riesgo que oscila entre el 5 y el 20% de padecer un nuevo evento. Actualmente, se están desarrollando diferentes escalas clínicas que tienen la finalidad de identificar a aquellos individuos con un mayor riesgo de nuevos eventos con el objetivo de adoptar en ellos un tratamiento y seguimiento más exhaustivos. Una de las más sencillas y usadas es la escala TRS2P, la cual no ha sido validada en una población como la nuestra. Por otro lado, existen marcadores subrogados que facilitan el estudio de la enfermedad cardiovascular, entre los que se encuentran la función endotelial microvascular. Hasta el momento, no se ha demostrado que la puntuación en la escala TRS2P se correlacione con cambios en marcadores subrogados como este. Nuestra hipótesis de trabajo (H1) es que la escala TRS2P es capaz de establecer un gradiente de riesgo cardiovascular a 6 años de acuerdo con la evolución de la función endotelial microvascular en pacientes con cardiopatía isquémica que han consumido una dieta cardiosaludable. OBJETIVOS: El objetivo principal de este trabajo es evaluar si la escala TRS2P es capaz de establecer un gradiente de riesgo cardiovascular en pacientes con cardiopatía isquémica de acuerdo con la evolución de la función endotelial microvascular tras el consumo de una dieta cardiosaludable. Los objetivos secundarios establecidos fueron: a. Estudiar el efecto del consumo de dos dietas cardiosaludables (dieta mediterránea y dieta baja en grasas) en la evolución de la función endotelial microvascular en pacientes con cardiopatía isquémica; b. Evaluar si existen diferencias en la evolución de la función endotelial microvascular entre los grupos de riesgo establecidos por la escala TRS2P dependiendo de la dieta consumida. POBLACIÓN, DISEÑO Y METODOLOGÍA: Los pacientes con cardiopatía isquémica incluidos en el estudio Cordioprev se clasificaron en 3 grupos de riesgo de acuerdo con la puntuación obtenida en la escala TRS2P. La función endotelial microvascular se estudió mediante flujometría láser doppler en un total de 664 individuos al inicio y tras 6 años de intervención dietética. La isquemia fue el estímulo elegido para evaluar la reactividad microvascular, la cual fue cuantificada mediante el área de hiperemia reactiva tras la isquemia. RESULTADOS: Se objetivó que el flujo basal (97,78 ± 2,79 frente a 179,31 ± 5,06 unidades de perfusión arbitrarias, aumento del 83,38 %, p < 0,001) y el área de hiperemia reactiva (4233,3 ± 127,73 frente a 9695,9 ± 205,23 unidades de perfusión arbitrarias por tiempo, aumento del 129,04 %, p < 0,001) mejoraron tras la intervención dietética, sin encontrarse diferencias entre los tipos de dieta (p > 0,05). Cuando se analizó la evolución de la función endotelial microvascular según el grupo de riesgo, se obtuvo que el flujo basal aumentó de manera similar en los tres grupos (p=0,47). El área de hiperemia reactiva mejoró en mayor medida en los pacientes del grupo de bajo riesgo (4416,6 ± 193,2 vs. 10424,59 ± 308,5 unidades arbitrarias de perfusión por tiempo) en comparación con los de moderado (4120,28 ± 211,9 vs. 9133,16 ± 338,3 unidades arbitrarias de perfusión por tiempo) y alto riesgo (4073,02 ± 303,7 vs. 8995,58 ± 484,82 unidades arbitrarias de perfusión por tiempo) con una p < 0,05. No se encontraron diferencias significativas en cuanto a la evolución de la función endotelial microvascular entre los grupos de riesgo según la dieta consumida. CONCLUSIONES: La escala TRS2P tiene la capacidad de establecer un gradiente de riesgo cardiovascular en pacientes con cardiopatía isquémica de acuerdo con la evolución de la función endotelial microvascular tras 6 años de intervención dietética. Además, el consumo a largo plazo de un modelo de dieta cardiosaludable (dieta mediterránea o dieta baja en grasas) mejora la función endotelial microvascular en todos los grupos de riesgo establecidos por la escala TRS2P, sin encontrar diferencias significativas entre ambos tipos de dieta.

BACKGROUND: Individuals who have suffered a cardiovascular event have a risk of suffering a new event of between 5 and 20%. Currently, different clinical scores are being developed to identify those individuals with a higher risk of new events to adopt a more comprehensive treatment and follow-up for them. One of the simplest and most widely used is the TRS2P score, which has not been validated in a population such as ours. On the other hand, there are surrogate markers that facilitate the study of cardiovascular disease, including microvascular endothelial function. So far, it has not been shown that the TRS2P score correlates with changes in surrogate markers such as this. Our hypothesis (H1) is that the TRS2P score can establish a 6-year cardiovascular risk gradient according to the evolution of microvascular endothelial function in patients with coronary heart disease who have consumed a healthy dietary pattern. OBJECTIVES: The main objective of this study was to assess whether the TRS2P score is able to establish a cardiovascular risk gradient in patients with coronary heart disease according to the evolution of microvascular endothelial function after the consumption of a healthy dietary pattern. The secondary objectives were: a. To study the effect of the consumption of two healthy dietary patterns (Mediterranean diet and low-fat diet) on the evolution of microvascular endothelial function in patients with coronary heart disease; b. To assess whether there are differences in the evolution of microvascular endothelial function between the risk groups established by the TRS2P score depending on the diet consumed. POPULATION, DESIGN AND METHODOLOGY: Patients with coronary heart disease included in the Cordioprev study were classified into 3 risk groups according to the TRS2P score. Microvascular endothelial function was studied by laser Doppler flowmetry in a total of 664 individuals at baseline and after 6 years of dietary intervention. Ischaemia was the stimulus chosen to assess microvascular reactivity, which was quantified by the area of reactive hyperemia after ischemia. RESULTS: Basal flow (97.78 ± 2.79 vs 179.31 ± 5.06 arbitrary perfusion units, 83.38% increase, p<0.001) and reactive hyperemia area (4233.3 ± 127.73 vs 9695.9 ± 205.23 arbitrary perfusion units per time, 129.04% increase, p<0.001) improved after dietary intervention, with no difference between diets (p>0.05). When the evolution of microvascular endothelial function was analyzed according to risk group, baseline flow increased similarly in all three groups (p=0.47). The area of reactive hyperemia improved to a greater degree in patients in the lowrisk group (4416.6 ± 193.2 vs. 10424.59 ± 308.5 arbitrary perfusion units per time) compared to those in the moderate group (4120.28 ± 211.9 vs. 9133.16 ± 338.3 arbitrary perfusion units per time) and high risk (4073.02 ± 303.7 vs. 8995.58 ± 484.82 arbitrary perfusion units per time) with a p < 0.05. No significant differences were found in the evolution of microvascular endothelial function between risk groups according to the diet consumed. CONCLUSIONS: The TRS2P score can establish a cardiovascular risk gradient in patients with coronary heart disease according to the evolution of microvascular endothelial function after 6 years of dietary intervention. In addition, long-term consumption of a healthy dietary pattern (Mediterranean diet or low-fat diet) improves microvascular endothelial function in all risk groups established by the TRS2P score, with no significant differences found between the two types of diet.