Diversificación de cultivos para el control de estreses bióticos en leguminosas

Abstract

Los monocultivos intensivos, aunque muy productivos, conllevan una pérdida de biodiversidad que dan lugar a una serie de problemas a largo plazo para la agricultura y los ecosistemas, como son, entre otros, pérdida de fertilidad del suelo o proliferación de plagas y enfermedades. La diversificación de cultivos se presenta como una alternativa necesaria para hacer frente a estas situaciones. Las leguminosas son unos cultivos de gran importancia para la alimentación humana y animal que, por su capacidad de fijar el nitrógeno atmosférico, juegan un papel fundamental en el marco de una agricultura sostenible. Se ven, sin embargo, sometidas a estreses biológicos importantes, como son las enfermedades o las malas hierbes. El control químico de los mismos conlleva elevados costes tanto para los agricultores como para el medio ambiente. El objetivo general de este estudio ha sido investigar si la diversificación de cultivos puede ser de utilidad para el control de enfermedades y malas hierbas en las leguminosas. Para ello se plantean los casos del oidio en guisante, la roya y las malas hierbas en las habas. Se emplean dos herramientas de diversificación como son la mezcla de cultivos (intercropping) y la mezcla de variedades. Se estudió el efecto del intercropping sobre el odio de guisante en seis ensayos de campo en diferentes ambientes. El guisante se mezcló con tres cultivos: habas, trigo o cebada. Del análisis global de todos los ensayos se concluye que la combinación con cebada y con habas redujo la severidad de la enfermedad, 44% y 32% respectivamente. En el caso de la cebada, el efecto barrera parecía ser importante para la explicación de esta disminución. Además, la cebada produjo más biomasa y creció más alto que el resto de cultivos. Esto se estudió en ensayos en cámara en condiciones controladas, confirmando la existencia de este efecto barrera. Las mezclas en diferentes proporciones de las variedades de guisante Messire, susceptible a oidio, con Eritreo, resistente, dieron lugar a reducciones de la enfermedad en Messire, tanto mayores cuanto mayor era la proporción de Eritreo en la mezcla. Esta estrategia puede ser de utilidad para prolongar la duración de la resistencia a oidio. Igualmente se estudió el efecto del intercropping sobre la roya de las habas, con cuatro ensayos de campo en diferentes ambientes. El análisis puso de manifiesto que sólo la combinación de habas con cebada conseguía reducir la roya, con una reducción global del 22% en los cuatro ensayos. Nuevamente el efecto barrera de la cebada parece fundamental para esta disminución, lo que se vio confirmado mediante ensayos en cámara en condiciones controladas. También se investigó la mezcla de variedades sobre la roya. En este caso, se mezclaron en proporciones diferentes la variedad Baraca, susceptible a roya, con Joya, resistente a la misma. Nuevamente la severidad en Baraca disminuyó a medida que aumentaba la proporción de Eritreo. Esta variedad, además de ser resistente a roya, producía más biomasa y alcanzaba mayor altura que Baraca, lo que apunta a un posible papel del efecto barrera, más allá de otros como puede ser la dilución del inóculo. Un estudio en cámara en condiciones controladas demostró la importancia del efecto barrera en la reducción de roya en la mezcla de estas dos variedades. El control de malas hierbas en habas mediante intercropping se estudió en cuatro ensayos de campo. Las habas se mezclaron con guisante, trigo o cebada. Se probaron dos sistemas diferentes: alterno con reemplazo y alterno con adición. En el caso de reemplazo no se obtuvo reducción de la presión de malas hierbas en el monocultivo de habas en comparación con las mezclas. En cambio, en el sistema de adición, la mezcla de las habas con cebada consiguió reducción tanto de la cobertura como la biomasa de las malas hierbas (92,7% and 76,6% respectivamente). La diversidad de malas hierbas no se vio alterada por ninguno de los tratamientos estudiados, tanto de mezclas como de monocultivos. El posible efecto de alelopatía por parte de la cebada en el control de malas hierbas se estudió en un ensayo en cámara en condiciones controladas. Se hizo crecer cebada en macetas, y se sembraron cuatro especies de malas hierbas (Polypogon monspeliensis, Matricaria camomilla, Sinapis arvensis y Medicago truncatula), habiendo extraído en unos casos las plantas de habas, mientras que en otros se las dejaron creciendo junto a las malas hierbas. Tanto el número como la biomasa de las malas hierbas se vio sustancialmente reducido en los casos en que había crecido la cebada con anterioridad. No se observaron diferencias importantes entre los casos en que se extrajo la cebada y en los que permaneció con las malas hierbas. Esto cofirma la importancia del efecto alelopático de la cebada frente a las malas hierbas. Los trabajos futuros deberán centrarse en la identificación de más mecanismos que expliquen los efectos de la diversificación de cultivos tanto en las enfermedades como en las malas hierbas. Asimismo, sería conveniente desarrollar programas de mejora encaminados a la obtención de variedades adaptadas a la diversiifcación, de modo que se pudieran maximizar los beneficios de ésta.